domingo, 2 de agosto de 2009

Perfecto acompañante

Hermoso amanecer, hoy te vi partir desenvainando tu dolor en cada paso que dabas. ¿Esta noche te veré? Un hasta pronto no es suficiente para calmar tus dudas; Dime qué te pasa, dime que te ocurre, puedes contar conmigo, ven, da la vuelta y susúrrame al oído, así como lo hacías tras cada alba, dime que me quieres, dime que me amas, que me necesitas, así como te necesito; Hoy dormiré con el dolor, triste compañero que camina paso a paso con la soledad, esta noche despedazare con furia todos los recuerdos transformados en belleza que por desgracia cada día en los sueños a mi regresan, solo quiero borrar tu huella de mi existencia, deshacerme de todo rastro de tu presencia en mi vida, no quiero dejar nada, ningún objeto que por descuido y malicia me haga recordarte, déjame estar a tu lado nuevamente, si tanto lo deseas, puedo hacer que sobre tu rostro se desvanezca el polvo del pasado y se acurruque el del futuro, que esos ojos, y tu sonrisas… Cada suspiro que me has dado se suprima con el viento que sopla hacia el olvido, tal vez pueda llegar a observar a través de tu carne, completamente iletrado a tu esencia, más sin embargo al final del cuento me sobraría el llanto y el dolor que no desea irse indócil a perderse junto conmigo, a evaporarse y desaparecer, y los pensamientos que inmolan mi fe… Y un temor creciendo cada vez más, un sueño entristecido, que te dilucida dándose cuenta de que a pesar del rechazo presente el dolor que siento será siempre mi acompañante


Te esperare, así como cada mañana lo hago...

No hay comentarios:

Publicar un comentario